9 cosas que puedes hacer durante el aislamiento
1. Leer
Leer es un regalo, un viaje a otros mundos y a la historia de otras personas. Desde las hojas de un libro podemos visitar cualquier ciudad y conocer otros puntos de vista e incluso llegar a emocionarnos.
Los libros nos conmueven, nos sorprenden, nos enseñan y nos invitan a reflexionar. Además, depende de tus gustos o de cómo te encuentres puedes elegir un género u otro.
Y no solo eso, leer proporciona numerosos beneficios: desde mejorar la inteligencia emocional por el hecho de empatizar con los personajes, mejorar el vocabulario, la ortografía y el conocimiento del mundo en general hasta entretenernos y favorecer estados de calma y relajación.
2. Escuchar música
La música es un lenguaje universal y forma parte de la historia de la humanidad casi desde el principio de los tiempos. Además, puede tener un gran impacto en el cerebro.
Desde pop, indie hasta rock o música clásica… Al igual que con los libros, tienes bastantes posibilidades para elegir. O incluso puede que ya tengas tus propias listas de canciones en alguna plataforma o programa. A veces, ponerle ritmo a nuestra vida nos motiva y nos hace sentir mejor.
Eso sí, según la revista de musicología de la American Psychological Association, escuchar música relajante tiene grandes beneficios neurobiológicos, emocionales y cognitivos:
- Mejora los niveles de concentración.
- Reduce el estrés.
- Provoca la liberación de serotonina y endorfinas.
- Reduce la presión arterial y la frecuencia cardíaca.
- Favorece el descanso nocturno.
Además, según Mind Lab Institution, la canción más relajante del mundo es Weightless del grupo Marconi Union. Te dejamos el vídeo por si quieres probar la experiencia:
3. Ver películas, series, documentales…
Otra de las cosas que puedes hacer durante el aislamiento es ver esas películas y series que tenías pendiente y para las que nunca encontrabas el momento.
Ahora bien, no es plan de que conviertas tus días en un 24 horas de peli y manta, es importante que hagas otras cosas para despejar la mente, sino acabarás probablemente aburrido o dando vueltas al menú de Netflix o cualquier otra plataforma sin saber qué escoger.
Además, hay documentales muy interesantes que te permitirán despejar algunas incógnitas o encontrar respuestas a muchas de las preguntas que sueles hacerte. Incluso, también existen plataformas como TED que ofrecen contenido de gran calidad a través de charlas impartidas por expertos en diferentes ámbitos y disciplinas.
4. Escribir
Decía Graham Green que escribir es una forma de terapia y no estaba muy equivocado. La escritura nos ayuda a expresar nuestros sentimientos, cómo nos sentimos y qué queremos.
Poner palabras a tus emociones es un ejercicio muy liberador y más si lo haces a mano. Tan solo tienes que probarlo.
5. Meditar
Meditar es una buena oportunidad para conectar con nosotros mismos, liberar tensiones y aliviar las preocupaciones.
Se trata de una práctica muy saludable que te permite observar tus pensamientos desde la distancia sin juzgarlos, experimentar calma y gestionar aquellas emociones más difíciles. Te dejamos este vídeo para comenzar:
6. Visitar museos virtuales
Si eres de esos a los que les encanta viajar, no todo está perdido porque más allá de los libros, a raíz de lo sucedido, hay muchos museos y monumentos que ofrecen visitas virtuales. Desde el Louvre en París, la Acrópolis de Atenas o el Museo del Prado en Madrid.
Además, también existe la posibilidad de realizar una visita a las ciudades que más te llamen la atención a través de series, películas y documentales. No es lo mismo, es cierto, pero es diferente.
7. Hacer ejercicio
El ejercicio físico no solo nos mantiene en forma, sino que también mejora nuestro estado de ánimo. De ahí que sea una de las recomendaciones más realizadas por parte de los profesionales sanitarios.
Además, a día de hoy existen muchas facilidades para realizarlo, tanto si eres principiantes como si llevas mucho tiempo practicando. Desde tutoriales, videos en directo o imágenes con tablas de ejercicios. Tan solo hay que buscar la modalidad que más encaje contigo y ponerte a ello.
8. Conectar con tu seres queridos
Nos encontramos en aislamiento sí, pero físico no emocional. Si convivimos este confinamiento con nuestros familiares, pareja o compañeros de piso es un buen momento para fortalecer los vínculos con ellos, conversar, jugar a algún juego o realizar juntos alguna actividad, aunque también puede que surjan algunas complicaciones o conflictos debido al estrés y las condiciones de la situación. No obstante, una buena disposición junto a dosis de empatía y respeto siempre son de gran ayuda.
Ahora bien, si te ha tocado pasar este tiempo solo, las nuevas tecnologías están de tu lado. Puedes hacer videollamadas con tus seres queridos y amigos, llamarlos por teléfono o hablar por whatsapp con ellos, lo importante es seguir conectados y tener en cuenta que esta situación de aislamiento no implica una desconexión emocional.
9. Aburrirse y descansar
Quizás parezca algo extraño que en un artículo sobre cosas que puedes hacer en casa durante el aislamiento hable de aburrimiento y descanso, lo cierto es que también son importantes. No podemos estar sin parar y llenarnos el día con mil y una actividades, también hay que parar, no hacer nada y tomarse un respiro. De lo contrario, seguiremos inmersos en esa atmósfera de velocidad y estrés en la que vivíamos.
Así, si hay momentos en los que no estás haciendo nada, no es malo y si no los tienes búscalos. De alguna forma, también son una oportunidad para estar contigo.
Podríamos seguir sugiriendo cosas que hacer durante el aislamiento, como hacer manualidades, ordenar armarios, bailar, dibujar o tocar un instrumento; incluso seguro que tú que nos están leyendo también puedes aportar algo. Sin embargo, lo que queremos también es hacerte llegar el mensaje de que es muy importante que seas responsable y que te protejas tanto a ti como al resto. Quedarse en casa está repleto de oportunidades y mientras mejor lo hagamos, menos días sumaremos.
