El fenómeno de Baader-Meinhof y la búsqueda de sentido
Imagina que vas a una reunión del trabajo y allí conoces a un compañero de oficina. Tal parece que tiene unos cuantos meses trabajando allí, pero nunca notaste su presencia. Luego de ese día, ahora parece que lo ves en todas partes, incluso puede que te lo encuentres en el supermercado. ¿Alguna vez has vivido esta situación? De ser así, entonces estás experimentando el fenómeno de Baader-Meinhof y la búsqueda del sentido.
Se trata de un fenómeno que vivimos todos los seres humanos porque guarda relación con la función de nuestro cerebro. Con el fin de hacer conclusiones de manera más rápida, nuestro cerebro tiende a buscar patrones en la información que recibimos. A continuación, conoceremos más sobre este efecto y cómo influye en nuestro comportamiento.
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¿Qué es el fenómeno de Baader-Meinhof?
Lo primero que debemos saber sobre el efecto de Baader-Meinhof es que se trata de un sesgo cognitivo común en los seres humanos. Cuando hablamos de un sesgo cognitivo, nos referimos a una especie de “atajo” que toma nuestro cerebro para procesar la información. Por ejemplo, en el sesgo de autoconfirmación, las personas solo consideran la información que valida sus creencias.
Entonces, si alguien cree que existen las sirenas, lo más probable es que solo reconozca como válida cualquier información que apoye sus ideas. Aun cuando exista una gran cantidad de evidencia que cuestiona la existencia de las sirenas o la niega por completo. De esta manera, vemos que los sesgos distorsionan el modo en que procesamos la información que proviene del exterior.
En este sentido, el fenómeno de Baader-Meinhof se caracteriza por el aumento de la consciencia sobre algo en particular. Uno de los ejemplos más claros de esto es la publicidad; supongamos que un día ves un anuncio sobre una marca de alimentos. La marca no es nueva, pero nunca le habías dado demasiada importancia cuando la veías en la tienda. Luego de ver esa publicidad, empiezas a notar los productos en diferentes tiendas y hasta sientes como si hubiera muchos anuncios al respecto.
En realidad, no cambió nada, las tiendas no se llenaron de productos de la noche a la mañana, ni tampoco hay más publicidad. Lo único que ocurrió es que te volviste más consciente de la existencia de dicha marca. Este fenómeno puede ocurrir con productos de todo tipo, personas o incluso con ciertas ideas o conceptos.
¿A qué se debe el fenómeno de Baader-Meinhof?
Como te mencionamos antes, el fenómeno de Baader-Meinhof no es más que la consecuencia de un sesgo cognitivo. Por ende, se trata de una tendencia que tiene nuestro cerebro al momento de procesar la información sobre el mundo. Esto no es algo negativo en sí, es un mecanismo natural que tiene nuestro cerebro para ahorrar energía y funcionar de manera óptima.
Para explicarlo mejor, debemos aprender un poco sobre la atención. Un aspecto importante sobre la atención es que la relevancia de un estímulo influye mucho sobre nuestra capacidad atencional. Nuestro cerebro no es capaz de poner atención a toda la gran cantidad de estímulos que recibimos a diario. Por tal razón, solo se enfoca en aquellos que son relevantes por alguna u otra razón.
Cuando ocurre el efecto de Baader-Meinhof, lo que sucede es que un determinado estímulo adquirió nueva relevancia para nosotros. Como resultado, nuestro cerebro comienza a ubicarlo ahora en todas partes y por eso creemos está en todos lados de repente. Pero, la realidad es que siempre estuvo allí, solo que antes no era importante para el cerebro.
Por otro lado, todos los sesgos cognitivos, incluyendo el Baader-Meinhof se deben a la tendencia del cerebro para buscar patrones. Con el objetivo de optimizar sus funciones, el cerebro humano suele buscar patrones que se repitan en la información que recibimos. Debido a eso, cuando un estímulo adquiere relevancia, el cerebro busca patrones que lo contengan.
Historia del fenómeno
La historia más compartida sobre este fenómeno se relaciona con un grupo terrorista alemán de los años 90. Se dice que, en 1994, un usuario hizo un comentario sobre una Facción del Ejército Rojo en un sitio web de noticias. El grupo en cuestión era conocido como la Banda Baader-Meinhof. Posterior a la publicación del comentario, muchas otras personas empezaron a compartir noticias sobre el grupo.
A causa de eso, este fenómeno adquirió dicho nombre hasta la actualidad. También es común que los científicos se refieran a este efecto como la “ilusión de frecuencia”. En pocas palabras, tenemos la falsa percepción de que algo o alguien aparece con más frecuencia en nuestras vidas, pero no es así.
¿Puede ser peligroso este fenómeno?
Si bien los sesgos cognitivos son naturales en los seres humanos, conviene tener cuidado con nuestra percepción de la realidad. Las personas acostumbramos a tomar decisiones con base en la información que recibimos del entorno. En el caso del fenómeno Baader-Meinhof, puede generarnos ideas equivocadas sobre las personas.
Si retomamos el ejemplo del principio donde conoces a una persona y ahora la ves con más frecuencia, hay quien podría pensar que están siguiéndole. También podríamos elegir comprar algo que no necesitamos o que no es bueno para nosotros solo porque parece ser popular ahora. La ilusión de frecuencia podría llevarnos a creer que algo es cierto solo porque se repite muchas veces.
En internet es común que encontremos información falsa o sesgada que se replica en muchos sitios webs diferentes. Si vemos el mismo dato de forma repetida en diferentes lugares, es posible que creamos que es cierto cuando no es así.
Para finalizar, el fenómeno de Baader-Meinhof es algo que experimentamos todos los días y puede ser inofensivo gran parte del tiempo. Sin embargo, es importante que tengamos cuidado cuando se trata de información que usaremos para tomar decisiones clave sobre nuestra salud.
