La fuerza de voluntad y el éxito en la vida
Antes de nada… ¿Qué es el éxito?
Si vamos a hablar del éxito, quizá lo primero que deberíamos hacer es definirlo. Y, la verdad, no es algo fácil. Probablemente, existen tantas definiciones de éxito como personas hay en el mundo.
Para algunos, el éxito puede ser formar una familia. Para otros, puede ser el reconocimiento de los demás. Para este de aquí, puede ser escribir un libro. Para aquel de allí, montar una empresa milmillonaria.
La verdad, ninguna definición está bien y ninguna está mal, porque el éxito, al final, es algo subjetivo (aunque dependa de cómo nos ven los demás). Yo, personalmente, me quedo con una definición que no oí a ningún psicólogo, sino a Risto Mejide:
“El éxito es que la gente que admiras te reconozca tus logros y esté orgullosa de ti”.
Generalmente, las personas que admiramos se pueden ubicar a varios niveles: Tenemos a nuestros familiares, especialmente padre y madre; después tenemos a amigos y conocidos; después tenemos a personas desconocidas, pero que son referentes…
Para conseguir el reconocimiento de una madre o de un padre, por ejemplo, puede ser suficiente con conseguir una carrera, un buen trabajo y formar una familia. Sin embargo, para obtener el reconocimiento de esas personas que son referentes, puede que tengamos que hacer algo más complicado.
En general, esos logros necesarios para conseguir que nuestros referentes nos reconozcan, son lo que, popularmente, llamamos éxito. Por ejemplo, es probable que, si quieres el reconocimiento de un escritor famoso, lo obtengas tras convertirte en un escritor de éxito.
Antes de pasar a los siguientes apartados, queda un último tema: ¿Es necesario la validación de los demás para obtener el éxito? Cada persona es un mundo, pero, en general sí, es necesario.
Si una persona considera que tiene éxito sin que se lo reconozcan quizá, simplemente, no necesita ni quiere el éxito.
¿Es necesaria la fuerza de voluntad para tener éxito en la vida?
Evidentemente, sí. La fuerza de voluntad es fundamental para conseguir las cosas que uno se propone, sea montar una empresa o hacer dieta. Sin fuerza de voluntad, a la mínima dificultad, se abandonará el proyecto.
Y el éxito implica dificultad, si no, no tendría ningún mérito. Por eso admiramos a los que han tenido éxito: Han sido capaces de sobreponerse a las dificultades y han tirado para adelante con lo que se habían propuesto.
¿Es suficiente con fuerza de voluntad?
Evidentemente no. Y esto es algo que hay que decir, porque, de un tiempo a esta parte, se ha popularizado la idea de que cualquiera puede emprender, que cualquiera puede hacer cualquier cosa, y que, con el suficiente esfuerzo, se consiguen las cosas.
Esto no es verdad. Para ser un buen jugador de fútbol no se necesita solamente fuerza de voluntad y buena predisposición. Hay gente que tiene mejores condiciones genéticas y ambientales para ciertas cosas, y gente que las tiene para otras cosas.
Sin embargo, esto tampoco debe significar que dejes de esforzarte porque “yo no tengo capacidad de tener éxito”. Lo que quiere decir es que no podrás tener éxito en cualquier cosa solo con esforzarte.
Pero sí puedes tener éxito. Lo único que necesitas es localizar aquello que sí que se te da bien, y, después, dedicarle horas y pensar en cómo desarrollar esa habilidad. Así se consigue el éxito.
Piensa en Paco de Lucía: Probablemente nadie ha tenido mayor talento para tocar la guitarra que él. Y, sin embargo, practicó 8, 12, 14 horas al día cada día desde que tenía 10 años hasta que murió.
¿Son las fuerzas del universo o eres tú?
No. Cuando deseas algo con todas tus fuerzas el universo no conspira para que se haga realidad. Al universo le da igual lo que deseas.
Esto podría parecerte algo malo o negativo. Puede que te haga sentir débil a la hora de intentar cumplir con tus objetivos. Pero debería ser al revés. Debería ser liberador: El universo no te va a ayudar, el destino no está preparándote un futuro fantástico solo porque quieras algo.
La única forma de conseguir lo que deseas es trabajando y teniendo fuerza de voluntad. Sin ella, no podrás lograr tus objetivos. Así que alégrate de que no dependas del destino o del Universo, sino solamente de ti mismo.
La fuerza de voluntad es fundamental para tener éxito en la vida. Esperamos que esta información te ayude a tomarte la vida con más ganas y plantearte objetivos ambiciosos. Si eres constante y tienes clara tu meta, podrás alcanzarla.