Por qué la soledad es buena: 10 razones
La soledad es buena porque implica un ejercicio de introspección en el que la persona pude llegar a autodescubrise.
La soledad es buena
La soledad es buena y, de hecho, es recomendable encontrar espacios de silencio y de un poco de distanciamiento. Esto no quiere decir que debamos vivir aislados o sin contacto humano.
Al contrario, encontrar espacios para estar a solas significa que podemos tener momentos en los que realmente disfrutemos de nuestra compañía y hagamos actividades gratificantes.
Después de todo, entre tantas demandas cotidianas, estar a solas puede ser muchas veces un regalo.
La mayoría de las personas tienen prejuicios sobre la soledad, sienten temor, pero esto es porque nos hemos acostumbrado a estar rodeados de personas. Sin embargo, a solas también podemos abrir la puerta hacia nuestra reflexión interior y crecimiento personal.
Así que todo depende del punto de vista que observemos el tema de la soledad. Hay momentos claves en los que la compañía de un buen amigo resulta bien, tales como cuando perdemos a un ser querido, o atravesamos una ruptura amorosa; sin embargo, fuera de ello, no debemos temer a la soledad.
Hay un lado positivo en la soledad
A continuación, te mostraremos algunas razones por las cuales la soledad es buena y, quizá, te animes a pasar un tiempo a solas.
Beneficios de la soledad
- La soledad nos permite conocernos mejor: entre el bullicio y la multitud sería imposible voltear la mirada hacia adentro para descubrir nuestros verdaderos talentos o pasiones.
- Conocernos mejor nos ayuda a relacionarnos mejor: en la medida que, estando a solas, podemos practicar la autorregulación de las emociones.
- La soledad nos permite mejorar nuestra autoestima: retirarnos por un momento de los estereotipos de la sociedad, mirar nuestro cuerpo con amor y nuestra forma de ser, nos permitirá tener una autoestima más alta.
- Podemos deshacernos del miedo: y percatarnos que la mejor compañía que podremos tener en la vida será la propia porque, al final, siempre podremos encontrarnos con nosotros mismos.
- Tener mejores relaciones con las parejas: porque, al aceptarnos como somos y no temer a la soledad, podemos entregar nuestro amor a otra persona, evitando caer en la dependencia emocional, o en otros estilos de apegos que no son saludables.
- Podemos explorar cosas nuevas: e impulsar nuestra creatividad.
- Encuentras paz interior: cuando estamos lejos del ruido y las demandas sociales. La calma y la serenidad solo podremos encontrarlas en la soledad.
- Nos permite reconocer todo aquello por lo que debemos estar agradecidos: y, entonces, nos damos cuenta de cuántas cosas hermosas hay en la vida y que tenemos con nosotros. Solo a partir de ese momento podemos expresar gratitud.
- Nos permite meditar: y disfrutar de todas las ventajas que esta práctica trae consigo; además, podemos hacer yoga, mindfulness, o cualquier otra práctica que nos ayude a autodesarrollarnos.
- Se refuerza la confianza: cuando no hay nadie más, somos nosotros quienes tomamos las decisiones más importantes en la vida y solo así podemos ser responsables de nuestros actos.
La soledad se puede tomar con buena actitud
La soledad es un fenómeno que podemos experimentar con la mejor de nuestras actitudes si comprendemos que la soledad es buena, nos llena de coraje y nos permite vivir inspirados.
Somos personas más conscientes y más autónomas, cuando estamos a solas. Hay quienes no cuentan con recursos para afrontar las situaciones en el mundo porque han desarrollado apegos ansiosos, y viven desde la inseguridad, el temor, la desconfianza y el pánico de no poder hacer algo bien.
La soledad solamente puede ser nociva si es permanente, pero debemos comprender que es necesario eliminar de este concepto todas aquellas etiquetas que solo lo han empañado.
Si sientes que no puedes estar un minuto a solas, que debes llamar seguidamente a una persona, que debes salir de casa, que no te sientes bien contigo mismo, entonces, tal vez, necesitas contactar con un profesional de la salud para que te brinde apoyo y puedas crecer en esos momentos enriquecedores.